¿Qué ocurre cuando mezcla dos de los ingredientes favoritos del mundo clásico antiguo, como la remolacha y los garbanzos? Obtiene un hummus brillante y de colores vibrantes que no solo produce una sonrisa, sino que también nutre sus dientes y huesos.
La remolacha tiene pocas calorías y muchas vitaminas y minerales, como calcio, folato y vitamina C, para desarrollar y mantener unos dientes y huesos fuertes. Las remolachas también han demostrado ser buenas para la circulación sanguínea, el rendimiento atlético, la digestión y el funcionamiento del cerebro y el hígado. Las hojas de remolacha se consumían en la antigua Roma y en Grecia, pero la raíz se cultivó por primera vez para consumo en 1542 en Alemania o Italia.