Todos hemos oído de hacer ejercicio para agrandar y definir más los músculos, pero ¿ha oído de ejercitar tu mandíbula? El mewing o hidratación lingual, una de las últimas tendencias en línea, afirma que puede cambiar la forma de la mandíbula centrándose en la posición de la lengua dentro de la boca.

El nombre viene del apellido del ortodoncista británico, el Dr. John Mew, el mewing de la lengua es la práctica de empujar la mandíbula y relajar y aplanar la lengua contra el techo de la boca. Los partidarios del mewing de lengua afirman que el mewing realinea sus dientes y hace que la mandíbula sea más grande y más fuerte y brinda una apariencia más cuadrada a la cara. También afirman que el mewing ayuda a tratar la apnea del sueño, la sinusitis, los ronquidos, el dolor mandibular y otros problemas.

Sin embargo, la Asociación Estadounidense de Ortodoncistas no ha promovido el mewing de lengua como un método eficaz para cambiar la forma de su mandíbula.

La mandíbula es parte de interacciones muy complejas entre el rostro, la cabeza y el cuello. Es imposible cambiar una parte de este sistema sin afectar las demás. Los posibles efectos secundarios negativos del mewing de lengua incluyen:

El verdicto: No hay investigaciones que sugieran que el mewing de lengua marcará una diferencia significativa en el aspecto de su línea mandibular, y existe la posibilidad de que practicarlo pueda afectar su boca. Si decide probarlo, asegúrese de compartir cualquier cambio en su rutina de cuidado bucal con su dentista. Este podrá darle recomendaciones y la información que necesita para garantizar una sonrisa saludable.